Never have 48 hours felt more like a week. I’m so proud of us. We don’t have many more days off this year, so we decided to squeeze every last drop of juice out of our weekend and hit up yet another wedding (this time, a beloved childhood friend of Ben’s). Did I mention that it has been wedding season since I was 23? I kid you not.Our destination was Cuernavaca, known in Spanish as “the city of eternal Spring”, not as in “the spring of eternal youth” but as in “not fall and definitely not winter”. Believe me, whenever you’re offered a ticket to run away from your least favorite season, you should take it.
On the day of the wedding we somehow squeezed in a tranquil morning coffee, an authentic mayan brunch (thank you, Jesus), getting lost courtesy of google maps, sightseeing in a taxi, and still having time to get ourselves spiffed up for the ceremony.
It took place at a gorgeous old-world hotel, decked out perfectly with elegant modern details. It’s different going to a wedding with your own in the forefront of your mind. We were definitely taking notes.
Highlight of the night: being placed at a table with two of the most interesting guys we’ve met in a while. I’m serious, the four of us just hit it off, to the casual observer we must have looked like long lost friends trying to catch up. They were such colorful characters, so inquisitive and appreciative and full of zest for life. They are also the first people in a long time to ask us about our love story and keep coming back to it even when we’d get interrupted. Most people find out we somehow met through the radio and then we trail off into realizing we are telling our story to ourselves. Needless to say, we think we’re inviting them to the wedding ;) It is worth nothing: interested people are always interesting.
Also, flying from Saturday to Monday is a lot less expensive than Friday to Sunday. #traveltip
To Xareni and Adrian, thanks for letting us be a part of your special day. We wish you a lifetime of happiness together!!!
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Fueron 48 horas con sabor a una semana. Pero, ¡qué forma de aprovechar! No nos quedan muchos días libres este año, asi que decidimos exprimirle hasta la ultima gota de jugo al fin de semana lanzándonos a una boda más (en este caso, de una querida amiga de Benjamin). ¿Les mencioné que ha sido ‘temporada de bodas’ desde que tengo 23 años? Fuera de broma.
Nuestro destino fue la bella ciudad de Cuernavaca, o “La ciudad de la eterna primavera”, como le dicen los locales. Creéme que si la vida te ofrece un boleto para escaparte de la estación del año que menos te gusta (solo por eso del frío, discúlpenme pero NO es de mi agrado), debes tomarlo.
El día de la boda logramos tomarnos un cafecito mañanero, disfrutar de un desayuno auténticamente Maya, perdernos cortesía de google maps, turistear en un taxi un rato, y de alguna manera tener suficiente tiempo para arreglarnos para la ceremonia.
Se llevó a cabo en un hotel hermoso con una arquitectura rústica que contrastaba perfectamente con las decoraciones modernas. Es diferente asistir a una boda cuando traes la inminencia de la tuya en tu mente. Te aseguro que estábamos tomando notas.
Sorpresa grata de la noche: nos tocó sentarnos al lado de dos hombres súper interesantes. En verdad hubo química entre nosotros cuatro; empezamos a platicar y nadie ni nada nos podía parar. Eran personajes tan coloridos, tan inquisitivos y apreciativos. También son las primeras personas en mucho tiempo que nos preguntaron de nuestra historia de amor, y cada que parábamos o nos interrumpían, querían regresar adonde nos habíamos quedado. Generalmente lo que pasa es que nos preguntan, se dan cuenta de que nos conocimos de alguna manera gracias a la radio, y Ben y yo terminamos platicándonos nuestra propia historia de amor ya sin audiencia. Estos chicos nos preguntaban cada vez más por detalles y no solo por preguntar. Había un interés real. Sin duda, están invitadísimos a la boda. :)
Cabe recalcar que las personas que se interesan siempre son interesantes.
Tambien, viajar de Sábado a Lunes es mucho más barato que de Viernes a Domingo. #tipsparaviajar
Para Xareni y Adrian, gracias por invitarnos a ser parte de este día tan especial, ¡les deseamos toda una vida de felicidad juntos!